Un pequeño placer cotidiano después de un día de trabajo es llegar a casa y encender una vela para que tu hogar se inunde de la fragancia que te hace sentir bien. Depende mi estado de ánimo y de la situación elijo una u otra:
- Rose de Mai, de au nom de la rose: para mí es el olor de las rosas después de la lluvia, cuando emanan todo su frescor, verde y puro.
- Fruits Rouges, de L'Occitane en Provence y Candied Chesnuts de Ladurée para cuando cocino pasteles y tartas.
- Secrets de Rose, de Les Parfums de Rosine, especiado y vibrante, para una velada romántica (lo ideal es usar el perfume a la vez).
- The Bourbon, de Flamant, un aroma que invita a tomar una copa con los amigos.
- Arabian Nights, de Ladurée, para el relax de un baño caliente o el placer de un buen libro.
- Touch, de Tocca, para trabajar desde casa con el ordenador.
Y si no se cuál me apetece, que muchas veces me ocurre, enciendo Infusion de Iris, de Prada, una fragancia limpia y fresca que no me canso nunca de oler.
Mmmmmm... que rico!
ResponderEliminarPues aunque parezca mentira a mi me cuesta mucho gastar el dinero en una buena vela... y las baratas no huelen! Soy más de sprays.
Besos!!